Hace ya muchos años, allá por 1935 abría en Sevilla la Confitería Filella, y desde entonces hasta hace bien poquito, ha inundado la ciudad con sus sabores, olores e imágenes mas singulares.
El 5 de Abril fallecía Isabel Filella Gomez, a los 74 años de edad, y con ella se echaba el cierre a los dos conferías que tenía en Sevilla, la de la trianera calle San Jacinto y la emblemática de la Avenida de la Constitución.
Son años, muchos años, vendiendo sus dulces a generaciones de sevillanos, y ese día de Abril, en pleno tiempo cuaresmal, cuando mas echamos en falta el dulzor de la torrija, se nos murió Filella.
Antes, poco antes, tan solo un par de semanas, andaba yo paseando en busca de besapiés por Sevilla, y me pare en su escaparate para fotografiarlo. Quien iba a pensar, que esa foto tan típica de sus vitrinas rebosantes de dulces seria de las últimas.
Tras estos meses de sequía pastelera para todos los sevillanos y nuestros visitantes, no he podido hacer otra cosa que volver a pararme ante sus escaparates e inmortalizar la pena de todos nosotros en las fotos, que nadie, desde los mas pequeños sevillanos de 1935 hasta los mas jóvenes de hoy día, queríamos por nada en el mundo ver.
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