Un café cantante era un tipo de local de ocio donde, además de despacharse bebidas, se ofrecían espectáculos de cante, toque y baile flamenco. Estos locales tuvieron su mayor auge a partir de mediados del siglo XIX y hasta entrada la segunda década del siglo XX.
Los cafés cantantes solían tener todos el mismo estilo decorativo: Paredes decoradas con espejos a carteles taurinos en un salón amplio con mesas, al fondo del cual se encontraba el tablao donde los artistas ofrecían sus espectáculos.
Los primeros cafés cantantes comenzaron a implantarse en las principales ciudades de Andalucía y en Madrid a partir del año 1846. Uno de los más antiguos cafés cantantes documentados es el que abrió en Sevilla en 1870 el cantaor Silverio Franconetti tras muchos años de viaje por América. Madrid fue pródiga en establecimientos de este tipo, de los que llegó a haber más de cincuenta cafés cantantes abiertos simultáneamente.
De todas las etapas históricas por las que se desarrolló el Arte Flamenco, consideramos que la denominada de los “Cafés Cantantes” es la más importante, siendo por varias razones:
-La primera por el clasicismo y definición artística de los estilos.
-La segunda por ser los Cafés el escenario que motivara la profesionalización, con los condicionantes positivos que lleva l esfuerzo de la superación artística.
-La tercera por ser el medio de expresión por el cual el flamenco tuvo una difusión casi Nacional, fuera de los límites habituales de Andalucía.
Coincidiendo que esta época nacen y ejercen las grandes figuras de éste Arte, siendo Estos: El Fillo, El Mellizo, Silverio, Curro Dulce, La Parrala, Juan Breva, Don Antonio Chacón Ramón Montoya, La Malena, La Macarrona, Manuel Torres, La Serneta, Aurelio Selles, Pepe de la Matrona, La Niña de los Peines…. en resumen, es la Edad de Oro del Flamenco cuya herencia de escenarios y de interpretes, afortunadamente, ha llegado hasta nosotros.
El Fillo, fue el maestro de todos los que han podido seguir este arte del cante gitano andaluz y flamenco. Tenía dos hermanos llamados Francisco de Paula y Juan de Dios (apodados Curro Pabla y Juan Encueros), también cantaores y tíos de un cantaor gitano que fue bastante famoso, Tomás El Nitri.
El café Cantante era el local donde se despachaban bebidas y se ofrecían recitales de cante, toque y baile flamenco. Permitiendo intensificar la practica del Arte Flamenco entre profesionales, teniendo su auge en la segunda mitad del Siglo XIX, hasta su decadencia en los primeros años veinte del presente siglo. Julián Pemartín sintetiza su función y características ambientales: Los Cafés Cantantes representan el lugar en el que el Flamenco tras una primera época de exhibición restringida, aparece ante un público muy numeroso, y deja de ser un arte minoritario para alcanzar difusión y arraigo popular.
Por un lado, el auge que toman en toda Europa los Cafés Cantantes con espectáculos, tanto musicales como, inquietud cultural. Por otro lado la necesidad de canalizar el costumbrismo andaluz. Para la Historia del Flamenco creemos que el hecho es positivo, no solo por su evolución, sino por limitación al definir bien los géneros que integran el espectáculo. Por un lado la Escuela Bolera, y por otro lo autóctono andaluz al integrarse al nuevo género flamenco con estilos que se crean y se perfeccionan, quedando la guitarra como instrumento único y definitivo, eliminándose estilos musicales e instrumentos como panderetas y violines.
Y aquel naciente flamenco no tardó en llegar a todos los rincones de España, por la labor de difusión consiguieron los Cafés Cantantes. Por las salas y tarimas de los Cafés Cantantes, pasó todo lo mejor y lo mejor del genero del flamenco, el más insospechado, variopinto y abigarrado mundo de variedades: Circo, Teatro, Musicales y Chirigotas.
Pauloski, empresario ruso del teatro de Moscú, vino a Sevilla en 1.894, con el propósito de contratar las primeras cantaoras y bailaoras con el fin de introducir los espectáculos en Rusia.
Respecto a los cafés cantantes sevillanos podemos mencionar entre otros el Café de Lombardos, Café Teatro Suizo, Café el Burrero, Café de Silverio, Café de Variedades, Café de la Escalerilla, Salón del Recreo, Café de Los Cagajones. Café de Las Triperas, Salón Oriente / Salón Barrera, Salón Novedades, Café del Arenal.
Actualmente, muchos locales de ocio nocturno continúan respetando la estructura básica del café cantante, si bien la mayoría lo hacen acogiendo géneros artísticos ajenos al flamenco. Estos locales suelen acoger a artistas noveles que pueden de este modo darse a conocer en salas de público reducido.
La práctica totalidad de las peñas flamencas (locales creados por un número limitado de socios para el fomento del flamenco) o tablaos flamencos de la ciudad continúan reproduciendo la estética básica de los cafés cantantes.
Fuente: http://es.wikipedia.org –http://www.serraniaderonda.com
antoniocamel©2012
Sevillano apasionado de la Historia y las Leyendas de su ciudad creó la Web ”Sevilla Misterios y Leyendas” en el año 2010.
En la actualidad es CEO de la misma y Director del programa de radio del mismo nombre que se emite en NEO FM desde 2021.
Éste es un tema apasionante y precioso para mí. En mi blog lo he tratado recientemente. Sigo los blogs afines que aparte de su aportación se abre otra ventana muy interesante también: la de la participación con lo cual nos enriquecemos todos.
Mi sincera enhorabuena, te sigo desde hace tiempo.
Saludos desde Gines.
gracias a ti, sevilla tiene mucho que mostrarnos a todos todavia.